La Maestra Sombra se recomienda para estudiantes que presentan dificultades de aprendizaje, problemas de concentración o necesitan apoyo adicional en el proceso de enseñanza-aprendizaje. También para aquellos alumnos que requieren una atención individualizada y un enfoque más personalizado en su educación. Esta herramienta puede ser beneficiosa para estudiantes con necesidades especiales, como autismo, TDAH o discapacidades de aprendizaje. Además, puede ser útil para estudiantes que necesitan refuerzo en ciertas materias o ayuda para mejorar sus habilidades académicas. En resumen, se recomienda para cualquier estudiante que pueda beneficiarse de un apoyo educativo adicional.

Es imprescindible señalar que NO está recomendada en niños con problemas de conducta, dado que agunas escuela solicitan maestra sombra por su poca capacidad de control disciplinario, recurriendo a ella como una "nana", que simplemente supervise el comportamiento de los menores.

Que tomar en cuenta para la implementación de Mestra Sombra:

1. Realizar una evaluación exhaustiva de las necesidades del estudiante: Antes de implementar la figura de la maestra sombra, es importante realizar una evaluación detallada de las necesidades del estudiante, incluyendo sus habilidades, dificultades y preferencias.

2. Es fundamental establecer objetivos claros y específicos para la intervención, de manera que se pueda medir su efectividad y ajustarla según sea necesario.

3. Colaborar estrechamente con el equipo docente compartiendo información relevante y coordinando estrategias para apoyar al estudiante de manera efectiva.

4. La maestra sombra debe adaptar las actividades y materiales educativos según las necesidades del estudiante, asegurando que sean accesibles y adecuados para su nivel de desarrollo.

5. Es importante que fomente la autonomía y la independencia del estudiante, brindándole las herramientas necesarias para que pueda desenvolverse de manera autónoma en el entorno escolar.

6. Debe proporcionar retroalimentación constante al estudiante, destacando sus logros y brindándole orientación para mejorar en áreas específicas.

7. Es fundamental mantener una comunicación abierta y fluida con los padres del estudiante, informándoles sobre su progreso y colaborando en la implementación de estrategias de apoyo en el hogar.

8. Es importante evaluar de forma continua el progreso del estudiante y ajustar las estrategias de intervención de la maestra sombra según sea necesario, con el fin de garantizar su desarrollo y bienestar en el entorno escolar.

(Psiquiatra/Paidopsiquiatra)